Hace mucho no sentía lo que siento en este día, una sensación de quinceañera a los cuarenta, porque tengo una cita una de estas noches con ese muchacho que hace 20 años me robó el corazón con una bella canción de amor.
Y como para gustos y colores han escrito los autores, debo decir que le tengo un «camote» a este músico y cantante peruano llamado Gian Marco. A ese chiquillo que andaba siempre acompañando a su madre detrás de las tablas del teatro Marsano, en Lima.
Vengo escuchando sus canciones desde hace muchos años. Música que me hipnotiza tal vez por que somos contemporáneos y muchas de sus historias me recuerdan a las mías. Porque cuando estoy de bajones y las hormonas desbalanceadas sus versos me reconcilian con la vida. Porque mientras camino por mi linda Yokohama, sus letras acompañan mis pasos en una serenata, solo mía. Y porque es el que me susurra al oído bellas melodías en mis almuerzos solitarios en los días de oficina.
Sí, tengo una cita. Una cita en donde no recibiré de regalo chocolates ni rosas. Me regalaran historias, versos, poesías…palabras con sensaciones y emociones hechas melodía.
Tengo mucha expectativa por este concierto como mucho de los peruanos que vivimos en estas islas.
Mucha ilusión por escuchar esa voz, que nos hace recordar con una canción, que con cada amanecer, la vida nos regala, DIAS NUEVOS.
by Nan.
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