Muchas estaciones de gasolina en el área metropolitana de Tokio agotaron este lunes toda su existencia mientras los distribuidores de petróleo vieron afectados sus envíos directos a las zonas afectadas por el terremoto y el tsunami.
Además, los cierres de autopistas y los atascos de tráfico interrumpieron las entregas de los camiones cisterna a Tokio y las provincias vecinas.
La televisión local mostró largas líneas de coches en las gasolineras de Tokio. Sin embargo, el diario económico Nikkei afirmó que tiene suficiente combustible en el inventario. Según la Asociación de Petróleo de Japón, los inventarios de gasolina están en 2,17 millones de al de 5 de marzo, suficiente como para cumplir sin problemas dos semanas de demanda.
Las refinerías de petróleo están produciendo 1.000.000 kilolitros de gasolina a la semana. «Tenemos suficiente inventario y la capacidad de oferta para satisfacer la demanda doméstica», afirmó un funcionario de la asociación.
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