Dos videos publicados en TikTok a finales de octubre por un creador de contenido extranjero volvieron a colocar bajo atención el cumplimiento de normas básicas en restaurantes de Japón. En ambos casos, un hombre joven, aparentemente de turismo, aparece utiliza huevos crudos que ha introducido por su cuenta para mezclarlos con alimentos servidos en distintos locales cuya ubicación exacta no ha sido revelada.
El primer vídeo fue grabado en un restaurante de la cadena de curry CoCo Ichibanya, donde el chico abre una caja de diez huevos y los agrega al plato. El video superó con las reproducciones habituales de su cuenta. Pocos días después, el mismo creador publicó un segundo vídeo, esta vez en una sucursal de Kappa Sushi, introduciendo el contenido de varios huevos dentro de una taza de ocha que luego mezcló con el sushi.
Las publicaciones generaron numerosas reacciones en redes sociales, sobre todo por los riesgos higiénicos y por la posibilidad de que acciones individuales generen confusión sobre la seguridad alimentaria de los establecimientos. En varias respuestas, usuarios señalaron que el protagonista contestó con mensajes despectivos a quienes cuestionaban su conducta.
Consultada sobre el caso por la revista Josei Prime, CoCo Ichibanya confirmó que “el video ha sido verificado” y recordó que la cadena prohíbe el ingreso de alimentos externos para todos los clientes. Explicó además que el personal del local no detectó la acción en el momento.
Kappa Sushi, aunque no respondió a la prensa, publicó el 3 de noviembre en su cuenta oficial de X un aviso —también en inglés— reiterando que no se permite consumir alimentos traídos de fuera.
Un periodista local explicó que este tipo de acciones pueden afectar la percepción pública de un local. “Si ocurre algún malestar o confusión, pueden surgir rumores que perjudiquen al establecimiento”, señaló al mismo tiempo que emplazó a la primera ministra Sanae Takaichi a tomar acciones frente a este tipo de problemas.
Este caso se hizo viral el mismo día en que Takaichi destacó en el Parlamento japonés la importancia de “una sociedad segura tanto para los ciudadanos como para los extranjeros que viven en el país”. Tras una reunión ministerial, la responsable de convivencia con extranjeros, Kimi Onoda, afirmó que el Gobierno actuará “cuando no se respeten las normas y las leyes”.
TURISTAS NO PAGAN EN DON QUIJOTE
En septiembre, otro episodio captado en vídeo puso a la cadena de tiendas Don Quijote en el centro de la conversación digital. La grabación muestra a una empleada japonesa intentando detener a un grupo de turistas extranjeros anglosajones que se dirigía a la salida sin haber pagado.
La trabajadora repite varias veces “¡La factura aún no se ha pagado!”, mientras uno de los visitantes se ríe con sus acompañantes y finge no entender japonés. El video se corta tras unos 30 segundos y no registra lo que ocurrió después, aunque se aprecia que los turistas logran abandonar el lugar.
El material generó reacciones diversas en redes sociales, con usuarios expresando preocupación por incidentes similares en comercios muy frecuentados por visitantes extranjeros.
Otros casos recientes también se han reportado en la cadena. En uno de ellos, una turista tomó un camote asado del estante de un local de Don Quijote y lo comió sin pagarlo; luego explicó que estaba “concentrada en crear contenido para el público japonés y olvidó pagarlo”.
Con el aumento histórico del turismo internacional, comercios y autoridades buscan reforzar la comunicación de normas básicas y mejorar los mecanismos para evitar malentendidos, manteniendo al mismo tiempo un entorno acogedor para quienes visitan Japón. (RI/AG/IP/)
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