La primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, utilizó la diplomacia del obsequio para fortalecer su vínculo con el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, durante su cumbre realizada hoy en Tokio. Takaichi regaló a Trump una gorra negra con el lema «JAPAN IS BACK» (Japón ha vuelto) grabado en letras doradas, junto con sus firmas.
El detalle fue inmediatamente publicitado por personal de la Casa Blanca a través de X. El eslogan no es casual, sino que fue el lema central de Takaichi durante su campaña para la presidencia del Partido Liberal Democrático (PLD), utilizado constantemente en su campaña y que mucho antes fue usado por el ex primer ministro Shinzo Abe.
El obsequio fue diseñado también para imitar las famosas gorras rojas de Trump con el eslogan «Make America Great Again» (MAGA).
El secretario Jefe del Gabinete, Minoru Kihara, confirmó en su conferencia de prensa diaria que la Primera Ministra también entregó a Trump artículos que rememoran su relación con el difunto e Abe.
Entre los obsequios se incluyó un palo de golf utilizado por Abe durante la visita de Trump en 2017, cuando ambos jugaron juntos al golf en el primer mandato del entonces presidente estadounidense. Además, Takaichi obsequió una bolsa de caddy que fue utilizada por Hideki Matsuyama, el golfista japonés que acompañó a ambos líderes en aquella ocasión.
La lista de regalos se completó con un toque de lujo japonés: pelotas de golf bañadas en pan de oro de Kanazawa, una ciudad famosa por su producción de pan de oro, con el nombre de Trump grabado, un guiño al conocido entusiasmo del presidente por este deporte. (RI/AG/IP/)
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