Tokio vive una noche cargada de expectación con la llegada del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al aeropuerto de Haneda. El mandatario aterrizó poco después de las cinco de la tarde, en medio de un operativo de seguridad sin precedentes, que desplegó a más de 18.000 agentes de la Policía Metropolitana. Su visita relámpago forma parte de una gira por Asia destinada a fortalecer vínculos con aliados estratégicos, en un contexto de tensiones comerciales y de seguridad con China.
Trump descendió del Air Force One vestido con un traje azul marino y corbata amarilla, saludó brevemente a los funcionarios japoneses y estadounidenses que lo esperaban, y se dirigió al helicóptero presidencial de los Marines, que lo transportó hasta el corazón de Tokio. Frente al Palacio Imperial, una multitud se congregó para presenciar su llegada, mientras el presidente escribía en su red Truth Social: “¡Tengo muchas ganas de ver al Emperador!”.
A las 18:05 horas, la comitiva presidencial ingresó al recinto imperial. Trump bajó de su limusina —la imponente “Bestia”— y fue recibido por el emperador Naruhito, quien le dio la bienvenida con un prolongado apretón de manos. Ambos intercambiaron palabras cordiales antes de posar para los fotógrafos y dirigirse al interior del Palacio, donde sostuvieron una conversación privada.
El encuentro marcó el primer contacto oficial entre el presidente estadounidense y el monarca japonés desde la visita de Estado de 2019, cuando Trump y la primera dama Melania fueron los primeros invitados extranjeros recibidos tras la ascensión de Naruhito al trono.
LAS TORRES SE ILUMINAN CON LOS COLORES DE EEUU
La capital japonesa se vistió con los colores de Estados Unidos: la Torre de Tokio y la Tokyo Skytree se iluminaron con luces rojas, blancas y azules, reflejando la magnitud del acontecimiento diplomático. En declaraciones a los periodistas durante el vuelo, Trump, de 79 años, comentó con su habitual tono optimista que había pasado recientemente una resonancia magnética “perfecta”, antes de añadir con entusiasmo que esperaba una “gran reunión” con la nueva primera ministra, Sanae Takaichi.
“Tengo muchas ganas de reunirme con la nueva primera ministra”, declaró Trump antes de aterrizar. “He oído cosas fenomenales sobre ella”.
La esperada cumbre entre Trump y Takaichi se realizará este martes por la mañana en la residencia oficial del primer ministro. Según fuentes del gobierno japonés, los principales temas de la agenda serán la defensa y la seguridad económica. Takaichi, que asumió el cargo tras una reñida contienda interna en el Partido Liberal Democrático, anunció recientemente que Japón destinará el 2% de su PIB a gasto militar en el año fiscal actual, alcanzando así la meta de inversión en defensa dos años antes de lo previsto.
Washington y Tokio buscan reafirmar su alianza estratégica en medio de un panorama regional tenso, marcado por el expansionismo de China, las provocaciones de Corea del Norte y la creciente cooperación militar entre Moscú y Pekín. Para Japón, la relación con Estados Unidos sigue siendo esencial tanto en materia de seguridad como de estabilidad económica. “Tengo muchas ganas de reunirme con la nueva primera ministra”, declaró Trump antes de aterrizar. “He oído cosas fenomenales sobre ella”.
El viaje continuará en Corea del Sur, donde el presidente estadounidense podría sostener un encuentro informal con su homólogo chino, Xi Jinping, durante el foro de la APEC. Mientras tanto, Japón refuerza su mensaje de compromiso con la alianza bilateral, al tiempo que busca mantener su autonomía estratégica frente a un Trump decidido a reafirmar su política de “Estados Unidos primero”. (RI/AG/IP/)
Descubre más desde International Press - Noticias de Japón en español
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
