Más de 37 millones de personas en Japón, entre afiliados al Seguro Nacional de Salud (Kokumin Kenko Hoken) y al sistema médico para personas de la tercera edad (Koki Koreisha Iryo Seido), vieron caducar sus tarjetas del seguro de salud el pasado 31 de julio, como parte del proceso de transición hacia la nueva tarjeta sanitaria integrada en el sistema de identificación digital “My Number”.
Desde el 1 de agosto, quienes posean una tarjeta vencida deberán presentar en los centros médicos la nueva Myna Hokensho (tarjeta de seguro vinculada al número personal) o un documento alternativo denominado «shikaku kakunin-sho» (certificado de verificación de afiliación), que está siendo expedido por los gobiernos locales.
En concreto, alrededor del 70 % de los afiliados al Seguro Nacional de Salud, en su mayoría trabajadores independientes, desempleados o estudiantes, no disponen aún de la Myna Hokensho. Ante esta situación, las autoridades municipales han comenzado a distribuir el «shikaku kakunin-sho» para garantizar que estas personas puedan seguir accediendo a la atención médica.
En el caso de los mayores de 75 años que están inscritos automáticamente en el sistema especial para personas de edad avanzada, todos los beneficiarios están recibiendo el certificado de verificación, independientemente de si cuentan o no con la nueva tarjeta digital.
El Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar ha instado a los ciudadanos a revisar la fecha de vencimiento de sus tarjetas actuales y a asegurarse de portar alguno de los documentos válidos al acudir a consultas médicas. Sin embargo, las autoridades también han aclarado que, incluso si un paciente solo presenta una tarjeta caducada, podrá recibir atención médica bajo el sistema público de salud hasta finales de marzo de 2026. (International Press)
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