El apoyo ciudadano a los partidos políticos tradicionales en Tokio muestra una clara tendencia a la baja, según una reciente encuesta electoral realizada por Mainichi de cara a las elecciones para la Cámara Alta. La proporción de personas que no se identifica con ninguna agrupación política alcanzó un récord de 51 %, lo que representa un aumento de 13 puntos en comparación con los comicios de hace tres años. Este fenómeno refleja un creciente desencanto entre el electorado.
El Partido Liberal Democrático (PLD o Jiminto), que encabeza el gobierno japonés, mantiene el primer lugar en intención de voto con un 22 %, pero esa cifra representa una drástica caída de 8 puntos con respecto al mismo sondeo previo a las elecciones anteriores. El segundo lugar es para el opositor Partido Constitucional Democrático (Rikken Minshuto), que registra un 7 % de apoyo, apenas un punto menos que en la encuesta anterior.
Otros partidos con representación relevante incluyen al Partido Democrático Popular (Kokumin Minshuto) (4 %, +3 puntos), el Partido Komeito (4 %), el Partido Comunista Japonés (3 %) y agrupaciones emergentes como Reiwa Shinsengumi, Sanseito, Nippon Ishin no Kai y el Partido Conservador Japonés, todos con un 2 % de respaldo. En el fondo de la tabla aparecen el Partido Socialdemócrata y el grupo ciudadano Minna de Tsukuru To, ambos con menos del 1 %.
PREFERENCIAS DE GÉNERO Y EDAD
El sondeo también revela diferencias significativas por género. El PLD y el Partido Democrático Popular tienen un respaldo más fuerte entre los hombres, con índices superiores en más de 1.5 y 2.5 veces, respectivamente, en comparación con las mujeres. En contraste, el Komeito registra mayor apoyo entre las mujeres.
Por edades, el PLD mantiene una presencia sólida entre los votantes de 30 años en adelante. Sin embargo, entre los jóvenes de 18 a 29 años, el Partido Democrático para el Pueblo se posiciona en primer lugar, seguido por el PLD y Sanseito. En los grupos de 30 a 40 años dominan el PLD y el Partido Democrático para el Pueblo, mientras que en los mayores de 50 años los más respaldados son el PLD y el Partido Constitucional Democrático.
Estos resultados ponen de manifiesto no solo una erosión en la base electoral del partido gobernante, sino también el crecimiento del voto independiente, especialmente entre los jóvenes y sectores desencantados con el actual panorama político. La fragmentación del voto y la volatilidad electoral auguran una elección impredecible. (RI/AG/IP/)
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