El número de personas en Japón que desarrollaron trastornos mentales debido al estrés laboral y recibieron reconocimiento como accidente de trabajo superó por primera vez los 1.000 casos. Según informó el Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar el martes 25 de junio, en el año fiscal 2024 se registraron 1.055 casos, un aumento de 172 respecto al año anterior, lo que marca el sexto año consecutivo con cifras récord.
Del total, 88 personas se suicidaron o intentaron suicidarse, nueve más que en el año anterior. El principal factor fue el acoso laboral o «power harassment» (224 casos), seguido por grandes cambios en la carga de trabajo o en el contenido del empleo (119 casos).
Por primera vez se contabilizó durante todo el año el impacto del hostigamiento por parte de clientes («customer harassment» o kasuhara), que alcanzó 108 casos, convirtiéndose en la tercera causa más común de trastornos mentales laborales. Esta cifra incluso superó los casos de acoso sexual (105). De los afectados por el acoso de clientes, 78 eran mujeres.
Por edades, los más afectados fueron personas en sus 40 años (283 casos), seguidos por trabajadores en sus 30 (245) y 20 (243). Por sectores, el ámbito de salud y asistencia social fue el más golpeado, con 270 casos.
Además, las solicitudes totales de reconocimiento por trastornos mentales relacionados con el trabajo también alcanzaron un nuevo máximo histórico, con 3.780 presentaciones, 205 más que el año anterior.
Las autoridades destacaron la urgencia de fortalecer los sistemas de prevención y apoyo psicológico dentro de las empresas, especialmente en sectores de alta exposición al trato con el público. (RI/AG/IP)
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