La policía de Osaka arrestó a un hombre de 41 años por el delito de abandono de cadáver tras encontrar el cuerpo de una niña dentro de una caja metálica rellena de concreto en un inmueble de Yao, Osaka. El detenido, identificado como Noriyuki Iimori, admitió haber ocultado el cadáver de su sobrina en una caja rellena de concreto hace más de una década.
El pasado 25 de febrero, un administrador del complejo alertó a las autoridades tras descubrir una caja metálica en un armario de una vivienda desocupada. Al percibir un fuerte olor proveniente del objeto, las autoridades investigaron y hallaron restos humanos en su interior. La caja medía 88 cm de alto, 45 cm de ancho y 35 cm de profundidad, con un peso aproximado de 230 kg.
Las autoridades lograron contactar con Iimori, hijo del último inquilino, quien admitió haber colocado el cuerpo de la niña, que en ese entonces tenía 7 años, en la caja. La niña era hija de su hermana y estaba bajo su cuidado. Iimori explicó que en octubre del año pasado, cuando su padre se mudó a esa vivienda desde otro lugar, trasladó la caja al nuevo hogar. Posteriormente, el padre se trasladó a un centro asistencial, mientras que el objeto permaneció en el inmueble hasta que el administrador, al percatarse de su presencia, informó a la policía.
El cuerpo encontrado tenía una estatura aproximada de un metro, aunque aún no se ha confirmado la identidad ni la causa de la muerte. Se realizará una autopsia para esclarecer estos detalles. Además, la pareja de Iimori, una mujer de unos 30 años, también fue interrogada. Ella declaró que en noviembre del año pasado ayudó a trasladar la caja, aunque desconocía su contenido. (International Press)
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