Alrededor de las 11:10 horas de ayer domingo, un hombre se comunicó con el cuerpo de bomberos de Sekigahara, Gifu, informando que había «ayudado a su esposa a colgarse». El reporte fue transferido a la estación de policía de Tarui, cuyos agentes se dirigieron al lugar indicado, una zona montañosa en la localidad de Matsuo, donde encontraron a una mujer inconsciente en el suelo.
La víctima, identificada como Hiroko Umezawa, de 58 años, fue trasladada de inmediato a un hospital, donde poco después se confirmó su fallecimiento.
Hoy, la policía arrestó a su esposo, Kenichiro Umezawa, de 66 años, residente en la ciudad de Minoh, Osaka, y dedicado al comercio de maquinaria, bajo sospecha de asesinato.
Según la investigación, entre las 9:45 y las 11:10 de la mañana del 23 de febrero, el sospechoso habría utilizado una cuerda para estrangular a su esposa en el bosque. En la escena del crimen, la policía encontró la cuerda atada a un árbol, lo que sugería un posible intento de suicidio.
En su declaración ante las autoridades, Umezawa negó haber asesinado a su esposa y afirmó que simplemente «la ayudé a suicidarse», lo que deja abierta la posibilidad de que el caso involucre un suicidio asistido.
La policía de Gifu continúa investigando los detalles del caso para determinar si la versión del sospechoso es verídica o si, por el contrario, se trató de un asesinato premeditado. Se espera que en los próximos días se realicen pericias forenses y se analicen pruebas en la escena del crimen para esclarecer lo ocurrido. (RI/AG/IP/)
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