La policía de la prefectura de Saitama arrestó ayer a dos empresarios, Fujio Sakurai (61) y Hiromichi Rokubo (66), bajo sospecha de fraude informático tras apropiarse de una transferencia bancaria enviada por error desde una empresa estadounidense.
En septiembre de 2023, una compañía estadounidense tenía previsto transferir 150.000 yenes (unos 960 dólares) a la cuenta de la empresa de Sakurai. Sin embargo, debido a un error, enviaron una cantidad equivalente a 150.000 dólares (unos 23 millones de yenes al cambio actual).
En lugar de notificar el error, Sakurai presuntamente transfirió 17 millones de yenes (aproximadamente 109.000 dólares) a la cuenta de la empresa de Rokubo, quien, según la policía, utilizó el dinero para inversiones financieras a petición de Sakurai.
En diciembre de 2023, un representante de la empresa estadounidense visitó la estación de policía de Higashi-Iruma en Saitama para denunciar que Sakurai no había devuelto los fondos enviados por error. Las autoridades comenzaron una investigación que resultó en el arresto de ambos empresarios.
Tanto Sakurai como Rokubo han admitido los cargos. Según la policía, confirmó que los fondos transferidos fueron utilizados para gestionar inversiones, aunque no se ha especificado si estas resultaron en beneficios o pérdidas.
En Japón, este tipo de acciones se considera fraude, incluso si los acusados argumentan haber actuado con «intenciones de inversión» y promesas de devolución del dinero. (RI/AG/IP)
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