El Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar de Japón ha anunciado que Okagi Hayashi, una mujer de 115 años residente en una casa para ancianos en la ciudad de Toki, prefectura de Gifu, se ha convertido en la persona más longeva del país. Este reconocimiento llega tras el fallecimiento en diciembre de Tomiko Itooka, mujer de 116 años en la ciudad de Ashiya, prefectura de Hyogo.
Hayashi nació en 1909, en plena era Meiji, y ha sido testigo de más de un siglo de transformaciones en Japón. A lo largo de su vida, crió a nueve hijos y ha llegado a tener una amplia descendencia que incluye 22 nietos, 36 bisnietos y 12 tataranietos. Según los trabajadores del centro en el que reside, Hayashi mantiene un notable apetito, lo que consideran un reflejo de su vitalidad.
El alcalde de Toki, Tomohiko Kato, celebró la noticia afirmando que «ser reconocida como la persona más longeva del país es motivo de gran orgullo para nuestra ciudad». Por su parte, el gobernador de Gifu, Hajime Furuta, destacó que este acontecimiento simboliza la importancia de construir una sociedad en la que las personas puedan disfrutar plenamente de su longevidad. (RI/AG/International Press)
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