Cada año, Earth Corporation, una farmacéutica japonesa que entre otras cosas produce insecticidas para el hogar y control de plagas, organiza una peculiar ceremonia religiosa para honrar a los insectos que han sido sacrificados durante sus investigaciones.
La más reciente tuvo lugar el pasado jueves 19 de diciembre en el templo budista Myodoji, en la ciudad de Ako, prefectura de Hyogo, donde los empleados de la compañía se reunieron para expresar su gratitud hacia estas criaturas.
La ceremonia, conocida como mushi kuyo (ofrenda para los insectos), se celebra desde hace más de cuatro décadas. En esta ocasión, cerca de 90 empleados del departamento de investigación y desarrollo de la empresa participaron tras finalizar su jornada laboral.
En el evento, se colocaron junto al altar del templo fotografías de siete especies de insectos, entre ellos el mosquito común (Culex pipiens), la cucaracha americana y la chinche de cama, como representación de los más de 100 tipos de insectos utilizados en los experimentos de la empresa. Durante el ritual, un sacerdote recitó sutras mientras los asistentes ofrecían incienso en señal de respeto y gratitud.
El centro de investigación de Earth Corporation en Ako, alberga a aproximadamente un millón de cucarachas y unas 100.000 moscas y mosquitos, además de muchas otras especies criadas para estudios relacionados con la mejora de productos de control de plagas. La empresa también gestiona instalaciones similares en Tailandia y China, lo que refuerza su compromiso con la investigación en un mercado global.
Tomihiro Kobori, jefe del departamento de investigación y desarrollo, dijo a la prensa local que el propósito del evento religioso: “Este día es uno de los más especiales del año. Nos permite agradecer a los insectos que nos han ayudado en nuestra labor científica y recordar nuestra responsabilidad ética hacia ellos”. (RI/AG/International Press)
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