A las 3:05 a.m. de hoy, 12 de diciembre, un tren de carga de 12 vagones operado por JR Freight sufrió un descarrilamiento en la estación de Sendai, en la ciudad de Satsumasendai, prefectura de Kagoshima. La locomotora y al menos dos vagones se vieron afectados, aunque no se registraron heridos. El conductor, único miembro de la tripulación a bordo, se encuentra ileso.
El tren se dirigía desde el patio de maniobras de Kumamoto, hacia la estación terminal de carga de Kagoshima cuando ocurrió el incidente. La causa del descarrilamiento está siendo investigada por la Comisión Nacional de Seguridad en el Transporte, que ha enviado dos especialistas al lugar para analizar las circunstancias.
A raíz del accidente, el servicio ferroviario en la línea JR Kagoshima sufrió alteraciones, con retrasos significativos en los horarios de otros trenes. Aunque las autoridades ferroviarias no han proporcionado un plazo para la recuperación del servicio, las labores de limpieza y reparación continúan sin que se haya determinado una solución definitiva.
El impacto del descarrilamiento también se extendió a la comunidad escolar. Según la Junta de Educación de Kagoshima, a las 4:00 p.m. del 12 de diciembre, varias escuelas secundarias de la prefectura se vieron afectadas por la interrupción del servicio ferroviario. Ocho centros educativos, con un total de 325 estudiantes, experimentaron retrasos en el inicio de las clases o se vieron obligados a enviar a los estudiantes a casa debido a la falta de transporte.
Un caso destacado fue el de la Escuela Secundaria Ijuin, ubicada en la ciudad de Hioki. Alrededor del 60% de los estudiantes de esta institución, unos 400, dependen del servicio ferroviario para llegar a la escuela. Dado el caos en los horarios, la escuela decidió suspender las clases de hoy. Se espera que las actividades se reanuden normalmente el viernes 13 de diciembre, excepto en las áreas directamente afectadas por el descarrilamiento.
El subdirector de la Escuela Secundaria Ijuin, expresó su preocupación por la seguridad de los estudiantes y destacó la gravedad de la situación: «Si el accidente hubiera ocurrido durante el horario de transporte de los estudiantes, habría sido una tragedia. Afortunadamente, no fue el caso, pero confiamos en que no se repitan incidentes como este». (International Press)
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