La Policía de Ibaraki informó ayer sobre el hallazgo de un cadáver en un campo de la localidad de Yachiyo. Los restos, en avanzado estado de descomposición, estaban envueltos en una lona azul y fueron encontrados el martes durante una excavación. Las autoridades sospechan que el cuerpo podría pertenecer a una mujer de unos 60 años que desapareció en mayo de 2020 en Koga.
El descubrimiento se produjo tras la confesión en julio de un hombre detenido por otro incidente, quien afirmó haber enterrado un cuerpo en un campo hace varios años. A partir de esa información, los investigadores inspeccionaron la zona y localizaron los restos a unos dos metros de profundidad. El cadáver estaba envuelto en varias capas de cinta adhesiva y cuerda y vestía un abrigo y pantalones largos.
Junto al cuerpo se encontraron otros objetos como la funda de un edredón también envuelta en una lona azul. Las autoridades continúan con la identificación del cadáver y la investigación para determinar la causa de la muerte.
El lugar del hallazgo es una zona rural con campos de cultivo y viviendas dispersas, cerca de una escuela y una guardería. (International Press)