El mes de septiembre, conocido tradicionalmente por marcar el fin del verano y el inicio de temperaturas más frescas, está sorprendiendo este año con una ola de calor inusual en Fukuoka. Hoy, la ciudad de Dazaifu registró una temperatura máxima de 38.3°C, la más alta jamás registrada en la región para este mes, rompiendo el récord histórico de temperaturas para septiembre. En otras localidades de la prefectura, como Fukuoka-shi y Kurume, los termómetros también superaron los 38°C, lo que ha generado preocupaciones por los efectos de este calor extremo en la salud de los habitantes.
Este calor abrasador ha sido descrito por muchos residentes como un «calor superior al de la propia temperatura corporal», creando condiciones sofocantes que se prolongarán, según los pronósticos, hasta el 20 de septiembre. Sin embargo, se espera que a partir del 21 de septiembre la región experimente un alivio con la llegada de lluvias.
El fenómeno climático ha convertido a Fukuoka en una de las regiones más cálidas de Japón este año, acumulando un total de 61 días de temperaturas superiores a los 35°C, un número que coloca a la prefectura a la cabeza en el país en cuanto a días de «calor extremo».
En Dazaifu, los habitantes describen la sensación como “insufrible”. Un visitante comentó: “Hace más calor que en Miyazaki”, en referencia a otra de las regiones cálidas de Japón. Otro señaló que solo podía caminar a la sombra para evitar los efectos del sol abrasador. Los medios locales han emitido advertencias sobre los riesgos de la exposición prolongada al sol, instando a la población a mantenerse hidratada y evitar la actividad física intensa al aire libre.
PARA VARIAR… LOS GIRASOLES DE ASAKURA
En contraste con el clima extremo, en la ciudad de Asakura, a unos kilómetros de Fukuoka, un espectáculo natural atrae la atención de los visitantes. Frente a la estación de servicio «Michi no Eki Harazuru», más de 160.000 girasoles están en plena floración, creando un hermoso contraste con el calor abrasador. Estos girasoles, que suelen florecer a finales de agosto, han alcanzado su máximo esplendor en septiembre debido a un retraso en la siembra causado por las lluvias intensas de principios de verano.
Los visitantes que se detienen para admirar las flores comentan que la escena es impresionante, con las brillantes flores amarillas resistiendo al sol implacable. «Pasé por aquí y me llamó la atención la belleza de los girasoles, así que decidí acercarme para verlos de cerca», dijo uno de los turistas.
VIENEN LAS LLUVIAS
Según la Agencia Meteorológica de Japón, las altas temperaturas persistirán hasta el 20 de septiembre, cuando se espera que un frente de lluvias traiga un alivio a las sofocantes condiciones. Se anticipa que a partir del 21 de septiembre las temperaturas caerán de forma significativa, ofreciendo a los habitantes de Fukuoka y sus alrededores un respiro muy necesario tras semanas de calor extremo.
Las autoridades han advertido que, a pesar del inminente descenso de las temperaturas, es importante seguir tomando precauciones mientras duren las altas temperaturas, especialmente para proteger a las personas mayores, los niños y quienes tienen condiciones de salud preexistentes. (RI/AG/IP/)