La policía de Saitama arrestó el pasado martes a Yuna Kamiishi, de 20 años y a una menor de 17 años por agredir y causarle lesiones a una estudiante de 15 años.
El 16 de junio, alrededor de las 23.35 horas, Kamiyama y la menor atacaron a la joven estudiante en Saitama, provocándole lesiones faciales que requirieron aproximadamente dos semanas de recuperación.
Las atacantes estaban enfadadas porque la estudiante había perdido un «tokko-fuku», un uniforme de gran valor simbólico usado por bandas de motociclistas y pandillas juveniles. La obligaron a arrodillarse y disculparse.
Cerca de la una de la mañana del 17 de junio, el padre de la víctima denunció la desaparición de su hija tras recibir una llamada de ella sobre la agresión. La policía investiga el caso.
Las agresoras llevaron a la estudiante a un lugar apartado para el ataque. El uniforme aún no ha sido encontrado y la policía continúa buscando a otros posibles implicados. (International Press)
