El pueblo de Fujikawaguchiko, en la prefectura de Yamanashi, instaló en mayo una cortina de grandes dimensiones frente a una tienda de Lawson para bloquear la vista del Monte Fuji con el fin de ahuyentar a los turistas maleducados que buscan los mejores ángulos para hacer fotos.
No es el único que los sufre.
En la vecina prefectura de Shizuoka, el Puente del Gran Sueño del Monte Fuji es un sitio popular entre visitantes que toman fotografías de la montaña desde su pasarela o escaleras, revela el portal SoraNews24.
Esta invasión de turistas perturba la vida tranquila de los residentes en el vecindario donde está el puente.
Los visitantes tiran basura en la calle, estacionan sus coches en área prohibidas, tocan las puertas de las casas para pedir el baño y son una amenaza para la seguridad.
Algunos no se conforman con tomar fotos desde las escaleras y la pasarela del puente; saltan una barrera de concreto y cruzan la carretera para llegar a la mediana, a pesar del tráfico y arriesgando sus vidas.
Los carteles de “Prohibido cruzar” en el puente no disuaden a los turistas.
Los conductores y residentes se han quejado ante las autoridades locales, que ha erigido una barricada de 400 metros para evitar que la gente ingrese a la carretera por el puente.
Además, en julio levantarán una valla de 1,8 metros de altura.
Los vecinos también han tomado medidas por su cuenta, como la colocación de conos de tráfico con cuerdas frente a sus casas para evitar que los visitantes se estacionen frente a sus propiedades o las invadan. (International Press)