El 25 de enero, un estudiante universitario de Taiwán de 21 años intentó meter 5,9 kilos de drogas estimulantes en Japón a través del Aeropuerto de Narita.
La mercadería que el hombre, procedente de Camboya, llevaba tenía un valor de calle de más de 370 millones de yenes (2,46 millones de dólares), informa Yomiuri Shimbun.
El estudiante fue arrestado y este mes la fiscalía de Chiba lo acusó.
Cinco ciudadanos chinos lo habían amenazado con un arma de fuego para que contrabandeara las drogas, dijo al principio a la policía. Más adelante, sin embargo, admitió que había inventado la historia.
El taiwanés llevaba las drogas atadas al cuerpo bajo una túnica de monje budista.
Ya lo había hecho antes. El 15 de enero entró a Japón con el mismo atuendo. “Nadie se me acercó y entonces decidí hacerlo de nuevo”, manifestó. (International Press)