El gobierno de Japón paga una reparación a las familias de las víctimas de asesinatos o a personas que han quedado con una discapacidad grave debido a un acto criminal.
La cantidad se establece de acuerdo con la edad y los ingresos de las víctimas en el momento de los delitos.
Eso significa que la cifra es baja si la víctima es un niño o una persona con bajos ingresos.
La Agencia Nacional de Policía de Japón quiere corregir la situación y desde agosto de 2023 un panel de expertos se reúnen para discutir sobre el tema.
El grupo de especialistas acaba de presentar una propuesta en la que recomienda un aumento significativo de los montos de las compensaciones, informa la NHK.
En el caso, por ejemplo, de un niño o una persona de bajos ingresos asesinados, su familia (padres, hijos o cónyuges) recibirá como mínimo unos 10 millones de yenes (67.000 dólares).
Los expertos también abogan por subir la reparación a un niño o una persona de bajos ingresos que sufran una discapacidad grave como consecuencia de un delito.
La agencia de policía aspira a que el nuevo sistema entre en vigor el próximo año fiscal, que comienza en abril. (International Press)