Los pronósticos del mercado cambiario por parte de las instituciones financieras japonesas y extranjeras se han inclinado hacia un yen más débil para los próximos meses.
Goldman Sach, el grupo de banca de inversión y valores más grande del mundo, estima que dentro de seis meses la cotización de la moneda japonesa estará a 155 yenes por dólar a causa del aumento de la brecha entre las tasas de interés de Japón y EEUU.
Hoy, el tipo de cambio del yen retomó la tendencia a la baja tras la publicación de los datos del empleo en EEUU en agosto y se ubicó en el nivel de los 146 yenes.
El diario Nikkei dijo que en agosto el yen tuvo una caída de 2,1%, la mayor entre la monedas de los países del G7.
A finales de agosto, Goldman Sachs pronosticó que dentro de tres meses la cotización de la moneda japonesa frente al dólar sería de 150 yenes y en seis meses llegaría a 155 yenes.
El Bank of America dijo recientemente que para finales de 2023 el dólar se cambiará a 150 yenes. «La Reserva Federal de EEUU seguirá manteniendo altas las tasas de interés durante un período más largo y el dólar seguirá apreciándose constantemente», sostuvo el banco.
En Tokio, SMBC Nikko Securities señaló que el tipo de cambio sería de 137 yenes por dólar a finales del año fiscal 2013, significativamente lejos de los 129 yenes que prefijo con anterioridad.
Analistas del Mitsubishi UFJ Morgan Stanley Securities, dijeron que es probable que el gobierno japonés intervenga en el mercado si la moneda llega los 150 yenes por mes, aunque otros sostienen que esa intervención ocurriría con un tipo de cambio de 155 yenes. (RI/NI/International Press)