La Policía de Niigata en cooperación investigadores de Tokio anunciaron la detención de Hiroshi Sudo (48), un residente de Hachioji, Tokio, bajo sospecha de abuso sexual y otros cargos.
El hecho ocurrió en noviembre de 2019 en la ciudad de Tachikawa, Tokio. Sudo es sospechoso de haber administrado sedantes a una mujer veinteañera, estudiante universitaria en ese momento. Se le acusa de haber realizado actos lascivos aprovechándose del estado indefenso de la mujer.
Sudo había sido arrestado anteriormente por haber operado de la misma manera en Niigata, Mie y en la ciudad de Nagoya.
Tomomitsu Murakami, jefe de la Unidad Especial de Investigación de la Primera División de Investigación de Niigata, explicó a la prensa cómo operaba el detenido: «Esperaba el momento oportuno, como cuando la persona iba al baño, salía al exterior para hacer una llamada telefónica o a fumar, y entonces aprovechaba para añadir en la bebida de la mujer sustancias preparadas por él mismo».
ESTOS CASOS SE ELEVARON EN 300%
Los encuentros entre Sudō y sus víctimas se produjeron a través de aplicaciones de citas en los cuatro casos. Fue él quien invitó a las mujeres a izakayas (tabernas japonesas) para luego llevarlas, en un estado indefenso, a un hotel donde abusaba sexualmente de ellas.
Este tipo de delito, en el que se droga a la víctima en una cita, ha aumentado aproximadamente un 300% en todo el país en la última década, según estimación de la policía japonesa.
«Recuerde -dice Murakami, el jefe de policía- si ha sido víctima, no perdone al culpable hasta que se haga justicia».
¿CÓMO EVITAR SER VÍCTIMA?
¿Qué se puede hacer para evitar ser víctima de este tipo de delito? «Si después de pedir un cóctel de color rosa o naranja, al regresar a la mesa el color de la bebida ha cambiado a azul o verde, existe una alta posibilidad de que se haya disuelto alguna sustancia», explicó el jefe Murakami.
Además, «una medida preventiva es beber todo el contenido de la copa antes de alejarse de la mesa».
En caso de ser víctima, es importante preservar las pruebas del delito. «No lave la ropa que llevaba puesta al momento del incidente y guárdela en una bolsa de plástico u otro recipiente. Cuanto más tiempo pase, menos pruebas habrá para vincular al perpetrador. Le pedimos que informe y consulte lo antes posible».
Incluso si la víctima se encuentra en un estado de confusión y no tiene pruebas concretas, la policía insta a que se realice una consulta en la comisaría más cercana. «Recuerde -dice Murakami- si ha sido víctima, no perdone al culpable hasta que se haga justicia». (Harumi Kai/International Press)
