El 30 de enero pasado, un trabajador de un centro de reciclaje en la ciudad de Sapporo encontró 10 millones de yenes (73.200 dólares) en medio de los desperdicios.
Se informó del hallazgo a la policía, que durante tres meses buscó al propietario el efectivo.
Expirado el plazo de tres meses como establece la ley, el dinero fue transferido al municipio de Sapporo, bajo cuyo mando operó el centro de reciclaje, informa Mainichi Shimbun.
La policía fue contactada 16 veces por personas que decían que el dinero podría pertenecerles.
Una de ellas dijo que salió de compras en coche y al salir de este, mientras caminaba desde el estacionamiento, se le cayeron 10 millones de yenes envueltos en papel de periódico.
Otra persona dijo que había colocado 10 millones de yenes en un clóset en su casa, pero que no podía encontrarlos. Podría haber tirado el dinero sin darse cuenta.
En ninguno de los casos la policía encontró pruebas suficientes para respaldar los reclamos.
Así las cosas, el misterio permanece: ¿a quién le pertenecían los 10 millones de yenes?
En 2017, en la prefectura de Gunma, una empresa de transporte y recolección de residuos encontró en medio de los desperdicios 42,51 millones de yenes (311.000 dólares).
El dinero pertenecía a un hombre fallecido, que tenía la millonaria suma guardada en su casa. Tras morir, su vivienda fue demolida y el efectivo se tiró a la basura por error.
Más adelante, el dinero fue entregado a la familia del hombre.
Takefumi Suzuki, jefe de una empresa de limpieza que gestiona objetos dejados por personas difuntas, cree que algo parecido habría ocurrido con el caso de Sapporo.
El dinero le habría pertenecido a una persona mayor fallecida, cuya familia, sin darse cuenta, habría tirado a la basura. Y como los parientes no saben de la existencia del dinero, no lo habrían reclamado cuando la policía hizo público el hallazgo.
Hace alrededor de un año, la empresa de Suzuzki encontró aproximadamente 5 millones de yenes (36 mil dólares) en un apartamento en Sapporo. Es la cantidad más grande que han descubierto.
Por ello, Suzuki aconseja a las familias de los difuntos que revisen bien las casas de estos.
El Banco de Japón calcula que las personas guardan en casa un total de 109 billones de yenes (798.000 millones de dólares). (International Press)