Un niño que retornaba a su casa procedente de la escuela donde estudia vio la punta de un dedo en una calle de la ciudad de Maizuru, en la prefectura de Kioto.
El pequeño le avisó a su mamá y esta llamó a la policía.
El incidente ocurrió el lunes por la tarde.
La policía revisó las imágenes de la cámara de seguridad en la zona y logró identificar al dueño del dedo.
Resultó ser un sexagenario repartidor, precisa Japan Today.
El hombre estaba haciendo entregas el lunes cuando su dedo quedó atrapado en la puerta trasera del vehículo que usa para los repartos, causando su amputación.
Pese a la gravedad del incidente, el hombre siguió trabajando.
Al culminar su jornada laboral volvió a su casa. No fue al hospital ni buscó ayuda médica. (International Press)