La policía registró hoy el ryokan Daimaru Besso, una posada tradicional con un siglo de antigüedad ubicada en el pueblo de Chikushimo en Fukuoka, que solo había cambiado el agua de sus baños termales dos veces al año, lo que permitió que la proliferación de la bacteria de la legionella.
Una inspección en noviembre pasado había encontrado que el nivel de bacterias se había disparado a 3.700 veces el límite establecido, lo que llevó al gobierno de Fukuoka a exigir que la posada corrigiera la situación. Esta semana la prefectura presentó una denuncia penal por presuntas violaciones de la Ley de Baños Públicos.
Pese a haber recibido la advertencia, Daimaru Besso mintió al informar a las autoridad que había cambiado el agua del baño de la manera adecuada y agregado cloro.
En una conferencia de prensa a fines de de febrero, Makoto Yamada, entonces jefe del operador de la posada, admitió haber hecho un informe falso: «Le dije a mi personal que estaba bien no cambiar el agua de los baños termales porque menos personas los usaban».
Yamada también admitió haber instruido al personal para que falsificara los registros de cloración del agua del baño presentados a la oficina de salud pública a pesar de saber que hacerlo era ilegal.
La posada fue fundada en 1865 y entre sus huéspedes más distinguidos se encuentra Hirohito, el emperador de la era Showa. (AG/RI/)
