El 16 de octubre de 2022, miembros del Dragón Chino, una organización criminal con sede en Tokio, organizaron una fiesta en un restaurante para celebrar la liberación de su exlíder de prisión.
La reunión, que se llevó a cabo en un restaurante francés ubicado en el piso 58 de un rascacielos en Tokio, culminó con una batalla campal.
Alrededor de cien pandilleros participaron en la pelea, rompiendo platos y causando otros daños al local.
El incidente aún tiene secuelas.
La policía de Tokio ha arrestado a un integrante de alto rango del Dragón Chino y a tres miembros de otra banda criminal llamado Chukaryu, con sede en la prefectura de Saitama, informa Asahi Shimbun.
Los cuatro formaban parte de un grupo de personas que no estaban invitadas a la fiesta e irrumpieron en ella, desatando la batalla.
Los alborotadores estaban molestos porque no habían sido invitados a la reunión, según la policía.
En diciembre la policía arrestó a otros cinco “intrusos”, que ya han sido liberados. (International Press)