A diferencia de las estaciones de tren en Tokio, en algunas situadas en las prefecturas de Osaka y Hyogo los asientos para los pasajeros en los andenes están colocados lejos de la vía férrea y, lo más sorprendente, en paralelo al recorrido los trenes.
Es decir, el usuario no se sienta mirando hacia los rieles, como manda la lógica.
¿Por qué?
Un representante de la compañía ferroviaria West Japan Railway explicó al portal SoraNews24 la razón: evitar que los pasajeros ebrios caigan a las vías y resulten heridos o, peor, sean atropellados por un tren.
Antes de que se instalaran los nuevos asientos, muchas personas borrachas sentadas se ponían de pie y caían del andén.
En varias estaciones en Tokio, e incluso en Osaka, existen puertas automáticas al borde del andén que funcionan como barreras para evitar que los usuarios caigan a la vía férrea.
Sin embargo, la red ferroviaria de la región de Kansai es complicada, motivo por el cual es un poco difícil instalar puertas en todos los andenes, dijo el vocero de JR West.
Más económico resulta colocar los asientos en paralelo a los trenes. (International Press)