El martes, una mujer que reside en la prefectura de Ibaraki acudió a visitar a sus padres después de que estos no atendieron sus llamadas telefónicas.
Poco después del mediodía, la mujer encontró a sus padres en casa. Su mamá, de 85 años, inconsciente, había sido acuchillada. Su papá, de 87, tenía una herida de arma blanca en el estómago.
La madre fue llevada a un hospital, donde se declaró su muerte, informa Japan Today.
El padre sobrevivió y está fuera de peligro.
Interrogada por la policía, la mujer reveló que cuando llegó a casa de sus progenitores, su papá le dijo que había apuñalado a su mamá y que él quería morir. El octogenario había intentado suicidarse.
La madre estaba enferma, contó la mujer, quien añadió que su papá era la única persona que la cuidaba.
En Japón no es infrecuente que una persona mayor asesine a su cónyuge enfermo y luego se suicide (o intente hacerlo). Los que sobreviven alegan que están agotados física y mentalmente de cuidar a su pareja. (International Press)