La gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, hoy confirmó la detección de un nuevo caso de Ómicron en la ciudad. Se trata de un ciudadano extranjero que había dado negativo en el control de cuarentena del aeropuerto.
Sin embargo, mientras cumplía el aislamiento obligatorio en su casa, una prueba de PCR reveló que tenía coronavirus. El resultado del análisis de genoma confirmó una infección con la variante Ómicron.
También se descubrió que uno de sus contactos cercanos estaba contagiado por el COVID-19. Para mayor preocupación, esta persona acudió el pasado domingo 12 de diciembre a un partido de la semifinal de la Copa Emperador de fútbol, por lo que se busca a unas 80 personas que estaban a su alrededor para tomarles la prueba.
Koike, visiblemente contrariada por esta noticia, manifestó: “Las personas que no se sientan bien deben ser examinadas de inmediato”.
Hasta ayer, el Ministerio de Salud de Japón había reportado 32 casos de Ómicron, todos ellos entre viajeros y contactos cercanos. (RI/NI/IP/)