La policía de Okayama arrestó a un hombre de 34 años, director representante de una empresa de limpieza de casas de la ciudad de Takamatsu, por revender más de 160.000 mascarillas que adquirió a través de las redes sociales.
El sospechoso es acusado de haber violado la Ley de Medidas de Emergencia para la Estabilización de la Vida que prohíbe la reventa de mascarillas por encima de su valor de mercado y por gran cantidad. La mascarilla es considerada un producto básico en situaciones de emergencia.
Según la denuncia, en abril pasado, el individuo, cuyo nombre no ha sido revelado, adquirió con fines de reventa unas 70.000 mascarillas a 44 yenes la unidad de un importador de Okayama y luego unas 14.000 mascarillas por más de 690.000 yenes (50 yenes la unidad).
En marzo, el gobierno japonés revisó el reglamento de la ley que prohíbe la reventa de mascarillas a gran escala. Los infractores serán condenados a prisión de no más de un año o a una multa de 1 millón de yenes. (International Press)
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