El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, está en vacaciones de fin de año, aprovechando sus días libres para jugar golf.
Mientras jugaba con los presidentes de las compañías Fujifilm y Mitsui en Kanagawa, Abe atendió brevemente a los reporteros.
“Ha sido un año difícil”, dijo Abe refiriéndose al 2019.
El gobernante japonés no especificó por qué, pero posiblemente lo dijo por los poderosos tifones que golpearon al país durante el otoño, según Jiji Press.
También es posible que haya tenido en mente el escándalo de favoritismo que lo involucró personalmente. El primer ministro fue cuestionado por invitar a partidarios a una fiesta del sakura financiada con fondos públicos.
2019, sin embargo, también ha sido el año en que se inauguró una nueva era con la ascensión al trono del emperador Naruhito y Abe se convirtió en el primer ministro japonés con más tiempo en el cargo. (International Press)
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