Hoy, si un usuario de las compañías de telefonía móvil NTT Docomo, SoftBank o KDDI decide rescindir de manera anticipada su contrato de dos años debe pagar una multa de 9.500 yenes (87,4 dólares).
En octubre entrará un vigor una ley que limitará la multa a 1.000 yenes (9,2 dólares).
Los tres gigantes de las telecomunicaciones en Japón implementarán diversas medidas para lidiar con el nuevo escenario.
NTT Docomo eliminará las multas a los usuarios de su tarjeta de crédito “d Card”, mientras que el resto de suscriptores deberá pagar una sanción de 1.000 yenes, informó Jiji Press.
Además, de ahora en adelante los portadores de “d Card” (su número se estima en 12 millones) ya no tendrán que firmar contratos obligatorios de dos años.
El nuevo plan se aplicará en octubre.
Por su parte, SoftBank planea reducir la multa a 1.000 yenes, mientras que KDDI abolirá la penalidad y los contratos de dos años.
El gigante del comercio electrónico Rakuten, que incursionará en el mercado nipón en 2020, no tiene previsto establecer contratos obligatorios de dos años. (International Press)
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