Japón ha sido sacudido en tiempos recientes por la muerte de niños víctimas de abusos por parte de sus padres.
Lo más doloroso es que varias muertes habrían podido evitarse si las autoridades hubieran actuado con mayor diligencia pues había antecedentes de violencia.
Ha habido casos en los cuales se permitió que los niños maltratados volvieran con sus padres o no se hizo un seguimiento de ellos, pues se juzgó que su situación no era muy grave.
Es fácil criticar a quienes fueron negligentes, pero a menudo es difícil evaluar la gravedad de un caso. Debido a la sobrecarga de trabajo, atender un caso significa desatender otro o no darle el suficiente tiempo. ¿Cómo priorizar? ¿Cómo juzgar que un caso es peor que otro para darle prioridad?
La inteligencia artificial puede ser la respuesta.
El Instituto Nacional de Ciencia y Tecnología Industrial Avanzada y la prefectura de Mie han puesto en marcha un experimento para combatir el abuso infantil mediante esta tecnología, informó la NHK.
¿Cómo funciona el sistema?
Se ingresan los datos de un caso de abuso infantil (por ejemplo, los moretones o heridas en el rostro de la víctima) para que la inteligencia artificial lo analice y ayude a evaluar si es tan grave como para separar al niño de sus padres y ponerlo bajo custodia.
El sistema tiene almacenados casos registrados en la prefectura, desde las circunstancias del abuso hasta cómo lidiaron con él las autoridades.
Con esta vasta información incorporada al sistema, la inteligencia artificial es capaz de predecir futuras situaciones de peligro para la víctima y la probabilidad de que abusen nuevamente de ella.
De esta manera, las personas encargadas de evaluar un caso pueden tomar mejores decisiones.
La prueba es la primera de su tipo en Japón y se desarrollará hasta febrero del próximo año. (International Press)
Be the first to comment