La policía emitió una nueva orden de arresto contra Yuichiro Kurihara, el hombre que fue arrestado un día después de que se encontró el cadáver de su hija Mia, de diez años, en el baño de su apato en la prefectura de Chiba, informó Kyodo.
La niña era víctima de abusos por parte de su padre. Aunque la autopsia no determinó la causa de la muerte, su cuerpo tenía huellas de golpes y se detectó sangrado interno.
Además de pegarle, el hombre la obligaba a estar de pie durante varias horas, a veces despertándola en mitad de la noche, y no la alimentaba bien.
La nueva orden de arresto se debe a una agresión ocurrida entre fines del año pasado y comienzos de este: el hombre arrastró a su hija hacia el baño, golpeó su rostro contra el piso y la aplastó, rompiéndole varios huesos, según Asahi Shimbun.
La policía cree que la madre de Mia, que también fue arrestada, fue testigo de la agresión, pero que no hizo nada para impedirla.
Cuando fue arrestado, Kurihara dijo que no había hecho nada malo y que sus acciones eran medidas para disciplinar a su hija. (International Press)
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