Utsunomiya pudo seguir prosperando, pero cometió un delito: no declaró 330 millones de yenes (2,91 millones de dólares) que ganó entre 2014 y 2016 como ingresos sujetos a impuestos.
La mujer fue encontrada culpable de evadir 130 millones de yenes (1,14 millones de dólares) en impuestos, informó Kyodo.
El Tribunal de Distrito de Osaka sentenció a la anciana a un año de prisión, pena suspendida por tres años, y ordenó el pago de una multa de 26 millones de yenes (229 mil dólares)
Utsunomiya se defendió diciendo que no estaba familiarizada con el procedimiento para presentar declaraciones de impuestos.
El tribunal dijo la mujer debió haber buscado el asesoramiento de oficinas de impuestos o expertos.
Aunque recalcó que la evasión del pago de una gran cantidad de impuestos es grave, el tribunal explicó que la pena de prisión es suspendida porque la mujer ya pagó una multa por no presentar sus impuestos y mostró remordimiento.
La defensa de la mujer pidió indulgencia para su clienta, alegando que decidió voluntariamente cerrar su puesto y que ha enfrentado “un castigo social severo». (International Press)
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