El gobierno de Japón estudiará la posibilidad de ofrecer incentivos a los trabajadores extranjeros que formen parte del nuevo sistema de visado para que no se concentren en las grandes ciudades, informó Mainichi Shimbun.
El asunto se discutió durante una sesión en la Dieta a raíz de la inquietud de un legislador de oposición.
Mitsuru Sakurai, representante del Partido Democrático para el Pueblo, planteó la posibilidad de que los extranjeros que sean aceptados en el marco del nuevo programa se concentren en las zonas urbanas y no contribuyan a mitigar la escasez de mano de obra en las áreas regionales.
Masaki Wada, jefe de la Oficina de Inmigración de Japón, respondió que estudiarán la introducción de incentivos.
Por su parte, el ministro de Justicia, Takashi Yamashita, dijo: «Examinaremos las medidas, como gobierno en su conjunto, para facilitar la aceptación de trabajadores extranjeros en zonas donde la escasez de mano de obra es cada vez más grave».
El gobierno de Japón espera que el proyecto de ley que presentó en la Dieta sea aprobado durante el actual periodo de sesiones (hasta el 10 de diciembre) para que el programa comience a funcionar en abril de 2019. (International Press)
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