Takahiro Shiraishi, el hombre de 27 años que asesinó y descuartizó a nueve personas en la prefectura de Kanagawa el año pasado, fue acusado por sus crímenes después de que los fiscales determinaron que puede ser considerado responsable penalmente, informó Mainichi Shimbun.
Shiraishi fue sometido a alrededor de cinco meses de pruebas psiquiátricas. El hombre ha admitido sus delitos.
El asesinato serial buscaba a mujeres que expresaban pensamientos o tendencias suicidas en Twitter y las atraía a su apato con la promesa de ayudarlas a quitarse la vida.
Sus víctimas fueron ocho mujeres y un hombre de 15 a 26 años. Las estranguló con una cuerda entre agosto y octubre. Los restos fueron hallados dentro de coolers en su apartamento.
Además, a algunas víctimas les robó dinero. Las ocho mujeres fueron violadas. Una de ellas le había prestado aproximadamente 360.000 yenes (3.238 dólares).
El descubrimiento del espantoso caso se produjo en octubre mientras la policía investigaba la desaparición de una mujer en Tokio, quien resultó ser una de las víctimas.
La policía entró al apato de Shiraishi y halló los cuerpos desmembrados de las víctimas.
Tras ser arrestado, el hombre dijo que cometió los asesinatos para robar dinero y que «quería llevar una vida fácil».
El caso conmocionó a la sociedad japonesa e impulsó al gobierno de Japón a actuar contra el suicidio. El Ministerio de Educación decidió financiar proyectos de consejería en 30 municipios a través de redes sociales como LINE, una aplicación muy utilizada por los jóvenes.
El gobierno de la prefectura de Nagano abrió consultas a través de la LINE durante dos semanas en 2017 y descubrió que había más consultas por este medio que a través de los centros telefónicos de asesoramiento convencionales.
Tomoki Miyata, un psicólogo clínico que brinda asesoría a través de las redes sociales en Osaka, revela que la mayor parte de las consultas son acerca de relaciones humanas. Miyata destaca la importancia del servicio porque permite tomar medidas preventivas antes de que las cosas empeoren.
El gobierno ha instado al sector privado a supervisar las publicaciones en redes sociales relacionadas con los suicidios.
Por su parte, Twitter Japan permite que los usuarios sean enlazados a una organización sin fines de lucro que trabaja en la prevención del suicidio cuando se buscan palabras relacionadas con este. (International Press)
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