Más de 6.400 supervivientes del terremoto en Hokkaido se refugian en centros de evacuación

Al menos nueve personas han muerto y unas 300 han resultado heridas por el terremoto de 6,7 que sacudió a la isla de Hokkaido en la madrugada del jueves.

Alrededor de 30 personas han desaparecido y más de 6.400 se han refugiado en centros de evacuación, detalló la agencia Kyodo.

De los 2,95 millones de hogares que se quedaron sin luz, esta ha vuelto en alrededor de 340.000. La compañía Hokkaido Electric dijo que tomará al menos una semana restaurar completamente el servicio.

Más de 20 casas fueron arrasadas en las localidades de Atsuma y Abira por deslizamientos de tierra. Los derrumbes masivos alteraron el paisaje de algunas cadenas montañosas en la zona.

El Nuevo Aeropuerto de Chitose, la principal puerta de acceso a Hokkaido, cerró todo el día después de que se derrumbó parte del techo de la terminal y hubo una fuga de agua y un corte de energía.

Se cancelaron más de 200 vuelos, afectando a más de 40.000 pasajeros. Sin embargo, el servicio eléctrico fue restablecido y los vuelos domésticos se reanudarían el viernes. Los aeropuertos de Hakodate y Asahikawa están operando.

Todos los servicios de tren están suspendidos.

Alrededor de 2.000 escuelas suspendieron las clases.

Las Fuerzas de Autodefensa de Japón han movilizado a unos 4.900 soldados a Hokkaido para tareas de rescate y apoyo. Se espera que su número se eleve a 25.000.

La inactiva planta nuclear de Tomari perdió temporalmente una fuente de energía externa, obligando a su operador Hokkaido Electric Power a utilizar un sistema de energía de emergencia para mantener refrigerado el combustible gastado. No se ha detectado ninguna anormalidad en los niveles de radiación alrededor de la central atómica.

La Agencia Meteorológica de Japón advirtió de que sismos de similar intensidad podrían remecer a la región durante una semana.

El terremoto en Hokkaido es el último de una serie de desastres naturales que han golpeado a Japón recientemente. Esta semana un tifón mató a más de once personas en el oeste del país. En julio, una ola de calor extremo causó la muerte de 133 personas y las lluvias torrenciales en el oeste del país se cobraron la vida de 220. En junio, un terremoto en Osaka mató a cinco personas. (International Press)