El mercado automotor de China, el más grande del mundo, ha estado dominado por General Motors y Volkswagen durante casi veinte años. En 2017, cada uno de ellos vendió alrededor de cuatro millones de vehículos.
Los que llegan después, Nissan, Toyota, Honda y Ford, están lejos de esas cifras, con ventas de más de un millón de unidades cada uno.
Nissan ambiciona despegarse del segundo pelotón y convertirse en uno de los tres principales fabricantes de automóviles en China, informó Reuters.
Nissan planea invertir cerca de 900 millones de dólares para aumentar su capacidad de producción en China en un 40 % para 2021. Si el plan se materializa, el gigante del motor fabricará 2,1 millones de vehículos anuales en el país asiático.
La compañía nipona vendió 1,5 millones de vehículos en 2017 y su meta es elevar la cifra a 2,6 millones en 2022.
Nissan, que en China está asociada con el grupo empresarial Dongfeng, esbozó en febrero un plan de cinco años para subir su cuota de mercado centrándose en los coches eléctricos y el Venucia, una modelo de bajo costo que la compañía produce en China, dos segmentos de mercado de los que se espera un incremento de la demanda.
Como parte de su expansión, Nissan y Dongfeng buscan que las autoridades les den luz verde para abrir una nueva planta de ensamblaje en la ciudad de Wuhan, que manufacturaría alrededor de 300.000 unidades al año.
Por su parte, Toyota apunta a ampliar su capacidad de producción en China en 240.000 vehículos al año. Actualmente fabrica 1,16 millones anuales. (International Press)
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