Un día después del terremoto de 6,1 que sacudió a Osaka, el suministro de agua y gas permanece interrumpido en la prefectura japonesa, informó la agencia Kyodo.
Debido a la falta de agua en zonas de las ciudades de Takatsuki y Minoo, las autoridades locales despacharon camiones cisterna.
Aproximadamente 112.000 hogares en las ciudades de Takatsuki, Ibaraki, Settsu y Suita carecían de gas el martes en la mañana. La compañía Osaka Gas Co. dijo que espera normalizar el suministro en todos los hogares el próximo lunes.
El martes a las 7:30 a. m., el número de evacuados se situó en alrededor de 1.700. El miedo es grande. Uno de los evacuados contó que se despierta cada vez que hay una réplica.
Por otro lado, las botellas de agua y diversos productos alimenticios (como los fideos instantáneos) han tenido una gran demanda en Osaka, llegando a agotarse en muchos casos. Un ama de casa declaró a Mainichi Shimbun que visitó más de cinco supermercados sin encontrar agua.
El gerente de un súper reveló que el día del terremoto las botellas de agua y té se acabaron rápidamente y que incluso se agotaron los productos que tenían previsto vender al día siguiente.
El terremoto ha dejado tres muertos (según las autoridades, la cuarta persona consignada como víctima murió de una enfermedad), más de 370 heridos y 334 casas dañadas (265 en Osaka, 64 en Kioto, tres en Nara y dos en Hyogo). (International Press)
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