El 17 de mayo, una chica de 17 años salió temprano de su escuela, ubicada en la prefectura de Kumamoto, después de decir que no se sentía bien. Más tarde, su abuela la encontró colgada en su casa. La adolescente aún estaba viva y fue llevada a un hospital, pero murió a la mañana siguiente.
Los padres de la chica, que estudiaba en un koko, hallaron una nota en la que decía que sus compañeros de clase le habían pedido que se suicidara, reveló Tokyo Reporter.
“Porque me dijeron que muera, yo moriré”, escribió.
La menor también dejó escrito que habló con un profesor, pero que no le sirvió de nada.
La escuela está investigando el asunto y ha entrevistado a algunos alumnos. Una persona relacionada con el koko dijo que hasta el momento no han detectado huellas de ijime o algún tipo de problema.
Sin embargo, la junta educativa de Kumamoto tiene previsto realizar una investigación independiente para averiguar si la chica fue víctima de ijime. (International Press)
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