La policía halló un cadáver debajo del helicóptero de las Fuerzas de Autodefensa de Japón que se estrelló el lunes contra una casa en la prefectura de Saga. El cuerpo pertenecería al piloto, el teniente coronel Kenichi Saito, desaparecido desde el accidente, informó la agencia Kyodo.
Con él iba su copiloto, el sargento Hiroki Takayama, cuyo cadáver fue encontrado el mismo lunes.
La casa, donde vivían cuatro personas, fue devorada por las llamas. Una niña de once años estaba en ella, pero felizmente logró escapar a tiempo. Era la única que estaba en la vivienda. En una casa adyacente, parcialmente dañada por el fuego, estaba su abuela, que también sobrevivió a la tragedia.
El ministro de Defensa, Itsunori Onodera, reveló que el helicóptero estaba en un vuelo de prueba después de que su rotor principal fue reemplazado.
¿Existe alguna relación entre la sustitución del rotor principal y el accidente? Onodera dijo que se está investigando la causa.
Expertos de las Fuerzas de Autodefensa de Japón dijeron que es probable que el accidente haya sido causado por un error en el trabajo de mantenimiento del helicóptero.
Por su parte, el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, se disculpó el martes en el Parlamento por «amenazar la seguridad de los residentes y causar un gran daño». (International Press)
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