Representantes militares de Corea del Sur, Japón y EE.UU. subrayaron hoy la necesidad de mantener la presión sobre Corea del Norte para que abandone su programa nuclear, un día después de que Donald Trump amenazara con «destruir totalmente» al país asiático.
El vicedirector general del Ministerio de Defensa surcoreano, Park Chul-kyun, el director de política de Defensa japonés, Taro Yamato, y el viceasistente para Asia Oriental de la Secretaría de Defensa de EE.UU., Andrew Winternitz, mantuvieron el encuentro por videoconferencia, confirmó a Efe un portavoz de Defensa en Seúl.
Los tres subrayaron la gravedad del último ensayo balístico realizado el pasado 15 de septiembre por Corea del Norte, que disparó un misil de medio alcance que recorrió unos 3.700 kilómetros y sobrevoló el norte de Japón.
El misil fue lanzado cuatro días después de que la ONU aprobara una nueva resolución que castiga al país asiático por el ensayo nuclear que realizó el 3 de septiembre.
Durante el encuentro de hoy se acentuó la «necesidad de mantener la máxima presión» sobre el régimen de Kim Jong-un y reforzar la cooperación militar de los tres aliados ante «las provocaciones» de Pyongyang.
No obstante, ninguno de los tres hizo referencia directa al beligerante mensaje lanzado por el presidente estadounidense en la víspera en el marco de la Asamblea General de Naciones Unidas.
«Estados Unidos tiene una gran fortaleza y paciencia, pero si nos vemos forzados a defendernos o a defender a nuestros aliados, no tendremos más remedio que destruir totalmente a Corea del Norte», advirtió Trump en su enésima subida de tono a la hora de apelar al régimen norcoreano.
Las continuas pruebas de armas de Pyongyang, que le han deparado ya dos nuevos paquetes de sanciones de la ONU solo en 2017, y el tono beligerante de la Administración Trump han elevado enormemente la tensión en la península coreana en el último año. (EFE)
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