Se llama OTOMOS y otorga a los padres control sobre los smartphones de sus hijos.
El producto de la empresa Momo, con sede en Kobe, permite que los papás establezcan restricciones de tiempo en el uso del celular para evitar que los niños se vuelvan adictos a este dispositivo, explica la agencia Kyodo.
Si los chicos se exceden en el uso del teléfono, la pantalla automáticamente se apaga. Los padres pueden controlar a sus hijos desde sus propios celulares a través de una aplicación que deben descargar. Y aquellos que no cuentan con teléfonos inteligentes, puede hacerlo desde un sitio web.
El teléfono se ajusta a la funda con un tornillo y solo puede ser quitado con un driver especial.
No es infrecuentes que ocurran accidentes cuando una persona utiliza su teléfono mientras camina. Pensando en ello, la funda desactiva el smartphone si detecta que el usuario está caminando.
Asimismo, si registra un golpe o choque, envía mensajes automáticos al teléfono de los padres.
OTOMOS estará en venta desde agosto. ¿Cuánto costará todo? Alrededor de 500 yenes (4,54 dólares) al mes, incluyendo la aplicación. Más información en http://momo-ltd.com/. (International Press)
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