El 17 de febrero, una mujer que con engaños logró que una septuagenaria residente en Tokio le entregara dos tarjetas bancarias retiró con ellas 840.000 yenes (7.697 dólares) de un cajero ubicado en una tienda de conveniencia.
La ladrona fue captada por cámaras de seguridad y una imagen de ella, descrita como una joven veinteañera, fue publicada por la policía que buscaba ayuda del público para localizarla.
La mujer resultó siendo una estudiante de 14 años que tenía 13 cuando cometió el delito, informó Mainichi Shimbun.
La menor, acompañada por su madre, se entregó a la policía el miércoles. La chica se enteró de que una imagen de ella estaba circulando a través de una amiga.
Enterada de que la ladrona era una menor de edad, la policía borró la imagen. La ley en Japón prohíbe la difusión de fotos o cualquier información que pudiera identificar a un menor involucrado en un delito. (International Press)
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