Su plan era cometer un asesinato-suicidio, según la fiscalía
A fines de mayo del año pasado, Yoshiharu Matsui (66) estranguló a su esposa de 65 años, a su hija mayor de 37 y a su suegra de 89, con una toalla y un cable eléctrico. Al día siguiente prendió fuego a su casa en la ciudad de Toyota, Aichi.
Matsui admitió su culpabilidad en la primera audiencia sobre su caso en el Tribunal de Distrito de Nagoya, informó la agencia Kyodo.
El anciano tenía previsto cometer un asesinato-suicidio ante su creciente ansiedad por el futuro tras descubrir que su esposa entregó más de 80 millones yenes (70.300 dólares) a una allegada a lo largo de más de 15 años, según la fiscalía.
La receptora de los 80 millones, una mujer de 66 años, está siendo enjuiciada por fraude en el mismo tribunal. (International Press)
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