La familia de un estudiante de 13 años víctima de ijime que se suicidó en 2012 en Hamamatsu, Shizuoka, llegó a un acuerdo para recibir 4,95 millones de yenes (41.700 dólares) en compensación, informó Mainichi Shimbun.
El acuerdo fue alcanzado con el gobierno de la ciudad y once personas, entre ellos los compañeros de clase del fallecido.
El estudiante se lanzó desde un edificio de apartamentos en junio de 2012.
La familia presentó una demanda en 2013, alegando que el chico había sido objeto de burla por parte de compañeros de clase, y víctima de golpes en el rostro y el estómago, y que todo ello lo empujó a quitarse la vida.
La familia solicitaba una compensación de 64 millones de yenes (540.000 dólares), pero decidió aceptar la recomendación del Tribunal de Distrito de Shizuoka para llegar a un acuerdo.
El acuerdo exige que los compañeros de clase del niño ofrezcan disculpas, y que el gobierno de la ciudad exprese su pesar por la pobre reacción de la escuela ante la muerte del niño y la promesa de tomar medidas para que una tragedia como la de 2012 no se repita.
Un estudiante de 14 años y ocho de 13 fueron responsabilizados por los maltratos sufridos por el suicida. (International Press)
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