Lo harán a tiempo completo y ganarán igual o más que los japoneses
El gobierno de Japón levantará la prohibición de contratar trabajadores extranjeros para realizar tareas domésticas en dos zonas económicas estratégicas: Osaka y Kanagawa, informó el diario Nikkei.
La nueva política será sometida a ajustes finales en septiembre y entrará en vigor en las prefecturas mencionadas a modo de prueba.
De acuerdo con las nuevas regulaciones, los empleados domésticos extranjeros trabajarán a tiempo completo y sus salarios serán iguales o mayores que los ingresos de los empleados japoneses.
Las empresas podrán contratar a trabajadores extranjeros hasta por tres años.
Eso sí, la práctica “cama adentro”, común en América Latina, estará prohibida. Sin embargo, los empleadores tendrán la obligación de asegurar una vivienda para sus trabajadores extranjeros.
La empresa Duskin, que provee de personal doméstico en Japón, ya cuenta con extranjeros como parte de su personal a tiempo parcial. Cuando entre en vigor la norma, sus empleados extranjeros podrán trabajar a tiempo completo en una variedad de servicios, desde el cuidado de niños hasta las compras, pasando por las tareas de limpieza habituales.
Por su parte, la empresa con sede en Tokio, Bears, reclutará a trabajadores de Filipinas y otros países para apuntalar su expansión a Osaka y Kanagawa. La relación de esta compañía con Filipinas es estrecha, pues en este país tiene previsto abrir una filial para capacitar a potenciales empleados domésticos con el objetivo de ganar terreno en el mercado laboral y sacarles ventaja a sus competidores.
Los extranjeros ayudarán a paliar la escasez de mano de obra en el sector, subrayó Nikkei.
En la actualidad, muchas personas que realizan tareas domésticas son gente mayor y que trabaja a tiempo parcial. Solo pueden desempeñarse como personal doméstico ciudadanos japoneses o residentes extranjeros con calificaciones, lo que restringe enormemente la disponibilidad de mano de obra en este ámbito.
Si la iniciativa tiene éxito, se aplicará en Tokio y otras regiones de Japón con alta demanda. Y, más adelante, si todo va bien, en el resto del país. (International Press)
