Tribunal de Osaka sentencia a delincuente a 5 años y medio de cárcel
Un japonés de 44 años, que fue rastreado y seguido por la policía gracias a un sistema de posicionamiento global (GPS) colocado en su automóvil, recibió una condena de 5,5 años de prisión por robos y otros delitos.
La Fiscalía había solicitado siete años de prisión para Katsushi Iwakiri.
Sin embargo, el tribunal de Osaka que lo sentenció no aceptó como evidencia la información recogida a través del GPS porque este fue colocado en el carro del delincuente sin autorización judicial.
El presidente del tribunal, Takaaki Nagase, sostuvo que la evidencia obtenida a través de dicho sistema era ilegal.
Conectar un dispositivo GPS a un vehículo sin una orden judicial «podría infringir seriamente la privacidad del usuario del automóvil”.
Nagase hizo hincapié en que la policía mantuvo en secreto que había utilizado datos recolectados gracias al GPS en su investigación. Ni la Fiscalía lo sabía.
Sin embargo, el juez aclaró: «La ilegalidad de una investigación usando un GPS no afecta la responsabilidad del acusado en lo más mínimo, y no puede ser tomado en cuenta para determinar la sentencia».
Además, el mismo Iwakiri admitió sus múltiples robos y sus cómplices declararon contra él.
Entre 2012 y 2013, Iwakiri y sus cómplices robaron bienes por un valor de 4,16 millones de yenes (33.869 dólares) en oficinas y autos en seis prefecturas. (International Press)
