El asesino no conocía a sus víctimas
La fiscalía solicitó la pena de muerte para Kyozo Isohi, el hombre que en 2012 asesinó a dos personas al azar en una calle en Osaka.
Durante una audiencia judicial en la Corte de Distrito de Osaka, la fiscalía arguyó que Isohi, que ha admitido su culpabilidad, estaba en pleno uso de sus facultades mentales cuando cometió los crímenes.
No obstante, la defensa del asesino intenta atenuar su responsabilidad aduciendo que sus facultades mentales estaban menoscabadas por el uso de drogas.
La fiscalía puso énfasis en la naturaleza perversa de los asesinatos aleatorios, pues cualquiera puede ser víctima de ellos.
Isohi estaba desesperado porque no podía conseguir el trabajo que deseaba y decidió asesinar con un cuchillo al productor musical Shingo Minamino (42) y la gerenta de restaurante Toshi Sasaki (66), a quienes no conocía. Fueron ellos como pudo ser cualquiera.
El asesino dijo que unas voces lo indujeron a cometer los asesinatos.
Los familiares de las víctimas están de acuerdo con la pena de muerte pues aseguran que Ishohi no muestra signos de arrepentimiento.
Por su parte, allegados al asesino han pedido que este no sea condenado a muerte para que pague en vida por sus crímenes. (International Press)
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